Imagina que vuelves a casa, abres tu cancela con el mando a distancia, entras y, apenas superada la entrada con sólo el capó del coche, adviertes que el perro ha decidido acostarse cómodamente en el medio del jardín, obstruyendo el paso. Te detienes al instante, sin duda. Pero ¿y si a los pocos instantes la cancela se cierra porque está temporizada? El riesgo de rayar el costado del coche es inevitable.
Sin mencionar los casos de dispositivos de este tipo en presencia de niños, cuando el juego podría consistir en superar rápidamente el umbral, un instante antes de que la cancela se cierre del todo. Este tipo de situaciones puede tener consecuencias trágicas.
Precisamente gracias a ejemplos concretos como éstos podemos apreciar la importancia fundamental de las fotocélulas para cancelas automáticas (correderas o batientes), ya que somos conscientes de su directa influencia en el tema de la seguridad.
QUÉ SON LAS FOTOCÉLULAS Y CÓMO FUNCIONAN
Comencemos con una definición general para entender de qué estamos hablando.
La fotocélula es un aparato electrónico basado en el efecto fotoeléctrico: cuando un metal recibe una radiación luminosa con determinadas características, emite electrones y produce corriente eléctrica.
La fotocélula tiene diferentes aplicaciones: se utiliza para la realización de cancelas y puertas automáticas, alarmas y sistemas antirrobo, o como multiplicador, es decir, como un instrumento que amplifica el efecto de una radiación luminosa.
Los campos de aplicación son muchos: en este artículo trataremos de no alejarnos demasiado de nuestro enfoque y tomaremos en consideración sólo las fotocélulas para cancelas automáticas batientes y correderas. Las fotocélulas normalmente son dos, un módulo transmisor y un módulo receptor, y se encuentran una frente a otra para impedir que el automatismo golpee a personas, animales o vehículos durante el movimiento.
El funcionamiento es muy sencillo: el transmisor envía un haz de luz infrarrojo al receptor. Si el haz es interrumpido (porque alguien o algo intercepta las fotocélulas), la central de mando detiene el motor (o los motores).
Estos dispositivos están expuestos directamente a los agentes externos y en algunos casos puede ocurrir que dejen de funcionar; sin embargo, el funcionamiento se puede restablecer fácilmente sin necesariamente sustituir las fotocélulas.
A continuación, una breve lista de las principales verificaciones a realizar para controlar el funcionamiento:
- Quitar los plásticos de cobertura de las fotocélulas para comprobar que los cuadros de maniobras en su interior estén limpios y que no haya telarañas, insectos u otros elementos que impidan el funcionamiento correcto.
- Comprobar que no haya cuerpos extraños en el radio de acción de las fotocélulas: eventuales plantas trepadoras, malezas y flores pueden comprometer la operatividad de la cancela si crecen delante de las fotocélulas.
- Si las fotocélulas son inalámbricas o tienen al menos un elemento inalámbrico (en general el transmisor), entonces podría ser necesario sustituir las baterías.
- Comprobar que el transmisor y el receptor (los 2 elementos que componen la fotocélula) estén alineados entre sí y no se hayan desplazado.
Después de estas consideraciones generales, entremos en el detalle de la gama Life.
Las fotocélulas para cancelas automáticas y los selectores propuestos por LIFE Home Integration se distinguen de las otras soluciones propuestas al mercado sobre todo por la resistencia a lo largo del tiempo y la solidez, garantizadas principalmente por el hecho de que el plástico que las compone ha sido estudiado y realizado directamente en la sede de la empresa, en la provincia de Treviso.
La filosofía LIFE prevé que el valor de la calidad “100% Made in Italy” se cultive no sólo en relación con los motores sino con toda la gama de productos, incluyendo las fotocélulas y los selectores.
Problemas como la infiltración de humedad en el interior de las fotocélulas o los defectos de funcionamiento debidos a plásticos de baja calidad o a una electrónica de bajo valor son fácilmente superados por todos los productos realizados por LIFE Home Integration.
Visio y Vire son las fotocélulas LIFE Home Integration, ambas sincronizadas con relé, y se diferencian por el tipo de aplicación. El modelo Vire se puede empotrar en soportes de columna Rex, disponibles en diferentes medidas, y en la versión con doble altura para el tránsito de vehículos pesados.
La gama de selectores se compone de varios modelos: selectores con llave como DES y DESE, selectores digitales DIXES, o la innovadora WI, práctica solución inalámbrica con sistema de codificación Rolling Code. El selector con teclado WI es el único modelo del mercado que puede memorizar nada menos que 16 códigos para la conexión de otros tantos dispositivos, mientras que el estándar de memorización habitual es de sólo 4 códigos.
También el selector WI demuestra que LIFE coloca la practicidad y la calidad a la cabeza de los valores en los que día a día, año tras año, se basa la realización de toda su gama de productos.